¡Gracias!


Queridos amigos:
Sólo dos palabras para agradeceros el apoyo que nos habéis demostrado a lo largo de estos años. A veces pensamos que nos habéis atribuido más méritos de los que merecíamos, y también debemos confesaros que hemos tenido la suerte de hacer en nuestras vidas aquello que nos gustaba, y que lo hemos hecho de la mejor manera que hemos podido.
Y lo que más importa: nos habéis hecho muy felices al saber que alguna de nuestras canciones también os ha dado un punto de felicidad, y que os ha ayudado, en muchos casos, a ser más optimistas ante las adversidades.
Sólo por eso ya habría merecido la pena esta aventura nuestra.
Gracias por todos estos años de entrañable fidelidad.
Resistid y resistiremos.

Pioneros
«No es ninguna exageración decir que el Dúo Dinámico marcó las directrices de lo que luego hemos conocido como pop español.»
Por: José Ramón Pardo
Desde el comienzo quiero dejar clara una cosa: mi admiración, a lo largo de los años, por Manuel de la Calva y Ramón Arcusa. O sea, el Dúo Dinámico. Muchas veces se encuestan las preferencias del público, los discos estelares de la historia de la canción pop en España. Y nadie, nadie, con más méritos que el Dúo para figurar en el primer puesto de esos estudios.
Primero, porque empezaron cuando a nadie se le había pasado por la cabeza hacer otra música que no fuera la copla, la ranchera, el bolero o la balada italianizante. Después, porque marcaron la senda a todos los que hicieron música pop en la década de los sesenta… y en las posteriores.
Cuando Manolo y Ramón empezaron a cantar, nunca supusieron que alguna vez lo harían profesionalmente y que medio siglo más tarde estarían aún sobre los escenarios y rodeados del respeto, el fervor y la pasión popular. Porque ni existía la profesión de cantante pop ni la experiencia nos decía si aquello que ellos empezaban a hacer iba a interesar a nadie. Recuerdo con nitidez la primera vez que escuché al Dúo Dinámico.
No fue en directo –ellos cantaban en Barcelona y yo vivía en Madrid– ni en un disco, todavía un lujo minoritario. Fue en la radio, ese aparato mágico que a los españoles de los últimos cincuenta nos abría una ventana al mundo. La canción, imposible olvidarla, fue “Recordándote” […] leer artículo completo